Nostalgia

Sin duda, y así suene a cliché, lo más hermoso que me ha pasado en mi vida es la existencia de Manolo. Un ser humano hermoso, cariñoso, inteligente, simpático, creativo, recursivo, independiente, caballero, comprometido, y muchas otras cosas más.

No obstante es un adolescente, y como a muchos la mamá se vuelve su verguenza más grande. Y aunque se que es normal que descargue todo con la persona que le pone la norma. No dejo de sentir un gran dolor al ver que perdí a mi amigo, compañero, hijo y amor infinito.

Ya está cerca a cumplir 16, sin embargo recuerdo como ayer cuando lo alimentaba y me miraba con un profundo amor. Cuando un beso mío curaba cualquier dolor, cuando ver a su mamá era una gran ilusión, cuando era una garrapatica y lo único que le daba seguridad y plenitud era un abrazo de su mamá.

Siempre quise que fuera un hombre independiente y lo es. Siempre quise que fuera un hombre seguro y lo es. Se que va a lograr todo lo que se proponga en la vida y eso me llena de orgullo. Y aunque tengo muy claro que los hijos son prestados y vienen a este mundo para que los ayudemos a volar, sentir que para el no soy más que una empleada, a la que solo le hago falta para cocinar o choferear, me parte el alma.

Mi vida entera ha girado en torno a él. Tal vez ese ha sido mi error. He querido ser el motor para que se cumplan todos sus sueños. He estado a su lado aun cuando no me lo ha pedido. Vivimos en un paraiso porque también era su sueño. Conoce medio mundo porque le he dado alas y he hecho hasta lo imposible porque todo lo que lo forme llegue a su vida. Lo he ayudado a crear ene mil proyectos, me he sentado en la ciclovía para acompañarlo cuando quiso vender, le he construido espacios que son únicos para él. Le he comprado peces, dulces, cosméticos, etc.. cada que el ha querido iniciar una nueva empresa. Lo único que no le he dado de lo que ha soñado es un hermanito, pero Dios quiso que yo me quedarra sola y no pude dárselo.

He corrido carreras, recorro la ciudad para que el cumpla y viva lo que quiere, he trasnochado, escucho la música que no me gusta,... hasta he pasado navidades sola solo por verlo feliz. Y la verdad seguiré haciendo todo lo que esté en mis manos para verlo feliz, porque así yo soy feliz. Solo que ahora estar sin mi existencia es lo que el disfruta, y eso duele.


Con Manolo mi vida no tiene barreras. Por él todo es posible. Y no me duele mover cielo y tierra por él, porque ha sido un niño responsable y comprometido. ha entendido cuando no se puede y ha sido un apoyo en todo momento. Recuerdo 2 o 3 pataletas en toda su vida, y eso que dudo si llegan a 3, porque es un niño consciente y jamás ha sido caprichoso o exigente, pero esta adolescencia es a mi a la que le duele.

Hace pocos días me mató, y aunque se que los adolescentes son crueles, aun no me logro reponer a escucharle que su papá y la esposa de él son su familia, y que no importaba si yo estoy pasando por dificultades económicas, yo TENGO que conseguir plata para comprar los productos alimenticios que ella vende, y a ella. Tenerle una sorpresa fue el peor error que yo haya hecho. No solo no me agradeció, me despreció y me exigió como si yo fuera su ... menos que nada. No es capaz de pedirle al papá que le regale algo de lo que ella vende, a mi me exige que le compre a ella porque ella es su familia, no yo.

Recuerdo cuando me hacía ojitos porque quería algo, y sabía que yo sabía que me estaba manipulando, y se reía cuando yo le hacía caras. Recuerdo que cuando lo recogía salía corriendo tan rápido que siempre me tumbaba con un abrazo. Recuerdo cuando hacía un gol y miraba a ver si la mamá si lo había visto, ahora me dice no te quedes al partido, has tus cosas para que me recojas y me lleves rápido a hacer lo que necesito.  Recuerdo, no hace mucho, cuando me pedía que juntos sembráramos un árbol y se sentía dueño del hogar que juntos construíamos, y siempre tenía un proyecto para que justos lo realizáramos.

Hoy lo recogí en el aeropuerto después de varios días sin verlo. No hubo saludo, no hubo beso y menos un abrazo.

Recuerdo tantas cosas que hacen que hoy tenga el corazón arrugado, al ver que he perdido a ese hijo que tanto he amado.

Definitivamente, los hijos si son prestados y yo ya me quedé sin el mío. Estoy orgullosa de él pero lo extraño y mucho.